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Hacer orgasmos con la mente

Tranquilos. Como ya explicamos cuando afirmamos que el tamaño no importa, las dimensiones de tu pilila no correlacionan con tu habilidad sexual y consecuentemente tampoco con el número de orgasmos que haces a tu partner. Para dominar la Cienorgasmología no hacen falta condiciones especiales, cualquier varón sano y normal puede lograrlo.

Al principio la técnica es esencial; mediante la técnica de los diversos toques podemos conseguir ir aumentando paulatinamente el número de orgasmos que hacemos a nuestra partner hasta llegar a hacerla cienorgásmica. Y eso es algo de lo que hoy por hoy sólo podemos presumir un centenar de personas en el mundo. La técnica de los toques consigue atrapar la mente (ver la sección en El Manual de Cienorgasmología) de la sorprendida mujer hasta llevarla fácilmente al éxtasis.

La regresión al útero materno y la reducción al estado fetal en el sexo

Para los que nos hemos movido con cierta asiduidad en el mundo de la hipnosis, la New Age y estas cosas, la regresión no es un misterio. 

En cierta medida es obvio para cualquiera que no haya sido atrapado por una de esas sectas inteligenciaemocionales y desvaríos similares que las historias que refieren son en su totalidad de casos de fabulación por parte de personas con un perfil de personalidad muy proclive a la huída de la realidad. 

La mayoría −los tontos no suelen ir contra sí mismos− acostumbran a recordar que en sus vidas pasadas fueron Tutankamon, Napoleón, Juan el Bautista o la Reina Cleopatra, pero ninguno recuerda haber sido el que limpiaba las letrinas en los campamentos de Esparta o un intrascendente personaje de cualquier época pasada, porque los que buscan envanecerse pueden hasta recordar haber sido mendigos, ejecutados por la Inquisición Española (bastante difícil estadísticamente pues fue con muchísimo la más justa y clemente de todas las inguisiciones, especialmente las socialistas) o por La Ira de Dios en Sodoma y Gomorra, pero nunca personajes irrelevantes. 



Presencié más de una experiencia de regresión con el resultado de que el individuo sometido a ella creía que lo que había experimentado era la rememoración de su pasado real, evidenciando la poca fiabilidad de los recuerdos, como advierte Daniel Schacter en su excelente libro En busca de la memoria

Uno de los rincones del pasado más visitados en este particular turismo esotérico es el útero materno, en cuya guía para trotamundos se recomienda explorar el origen de cualquier mal actual como si no fuese algo obvio−, disfrutando a la vez de esa estrictamente irrepetible sensación.




Este asunto me vino a la cabeza a propósito de la avidez masculina para introducirse en el cuerpo de la mujer y de la femenina para que el varón se introduzcan en su cuerpo. ¿Puede ser uno de los elementos que hacen tan irresistible el impulso sexual, junto al deseo de dominación y sumisión y el puro instinto reproductor? ¿Existe ese impulso de introducirse en el cuerpo de la mujer para fundirse con ella, diluirse, desvanecerse de vuelta al placentero estado embrionario? ¿para huir de la realidad o para qué? ¿Existe en la mujer el impulso de apropiarse del hombre, hacerlo hijo para tenerlo suyo allá en su vientre? ¿Quizá para después volver a parirlo? 

No quiero con estos desvaríos dar ninguna sugestión a las mentes blandas que abundan en el virtual mundo real para que fantaseen sobre el asunto −tampoco tiene mayor trascendencia, el que está payá, va a seguir estándolo diga esto o me lo calle− pero sí conocer vuestras opiniones. Si estoy loco, por favor, decídmelo antes de que sea demasiado tarde ;-)


El Jueves, Bernat Soria y el rollo infantil de los condones

¿Cómo definir a quien agrede a quien no responde a la agresión? ¿Cómo definir a quien se atreve con el pacífico y se achanta con el violento? La verdad es que me cuesta encontrar las expresiones más adecuadas sin caer en la zafiedad. Me pongo a pensar y lo que me viene a la cabeza son exabruptos, que no es que no se ajusten como un guante a la realidad, pero que desde luego no se corresponden con la importancia que tiene la revistilla esta.




El Jueves es un panfletillo decadente con un tufo a rancio que hace mucho tiempo dejó de hacerme gracia. Me recuerda al humor simplón que va de inteligente de otros que tal bailan, como el pobre Wyoming (Guayominí); y al amarillo viejo del Gabilondo televisivo o del radiofónico Luis del Olmo. Cierto que tiene que haber de todo, pero es lamentable que existan cerebros de tan bajo nivel evolutivo. Son las mentes de los carroñerillos, de esos resentidos, rencorosos (los semejantes se atraen), que husmean en los tubos catódicos o en las más modernas pantallas de plasma esperando encontrar un poco de putrefacción con la que apaciguar su cotidiana hambre de venganza contra el mundo. Luego rumian durante días la gracieta que les hace sentirse orgullosos de lo que piensan, como adultos aniñados obsesionados con sus juguetes, y siguen riéndose como si hubiesen encontrado la piedra filosofal de la comedia.

¿Cobardes? Sí, por supuesto, pero cobardes rastreros, de esos que como el
matxote etarra con nombre de detergente se ciscan en los pantalones cuando tienen que enfrentarse con alguien sin miramientos. Son como los críos que se esconden detrás de mamá, aferrados a sus faldas para no quedar solos ante el peligro, para insultar a su enemigo. A solas no tienen valor, por eso aprovechan que mamá esta cerca para soltar todas sus iras.



Pero es que además de gallinas son idiotas, porque aunque van de valientes vanguardistas, no son más que tentáculos de tercera fila del PSOE, cotillas, comadres, voceros de sus patéticas consignas caca-culo-pedo-pis en versión tronko para las Yenis, Vanes y Yosuas patrios que tratan inútilmente -vaya si es inútil- de desviar la atención de las torpezas y maldades del gobierno socialista. Se suman con estúpida vehemencia -y fruición, que diría el idiota solemne- al coro que insulta al de las gafas, al gordito o imberbe: "¡gafotas!", "¡cuatro ojos!"... le dicen inflados de sensación de superioridad.


En fin, aquí os dejo algunas de las elucubraciones que se han producido en la red para determinar el significado encriptado del bodrio, y para quien no haya leído aún el maravilloso producto de la sensibilidad creativa y artística de estas excrecencias humanas, ahí os dejo la caca que nos ha dejado el embustero Bernat Soria; procurad leerla o con el estómago vacío, o con un primperán a mano:



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Mejora tu vida conyugal limpiando de basura tu mente

El primer paso para conseguir poner al mal tiempo buena cara y atenuar los efectos desanimadores del invierno es poner a punto el cerebro. Quizá es precisamente el mayor ensimismamiento que produce esta estación constituye una especie de limpieza de la acumulación de basura mental −que ya sabemos que ocasiona el Alzheimer individual y social− esa especie de hibernación en la que la actividad frenética del estío decae. Pero ¿Por qué la llamo “basura mental”?  

La basura mental 

No, no voy a hablar de cero Zapatero, tranquilos. Lo que quiero es que imagines que tu ordenador se vuelve loco, el disco duro empieza a cobrar vida y en lugar de responder a las órdenes de tu teclado y ratón, comienza a funcionar independientemente. De repente surgirían −a medida que el procesador y la memoria de trabajo (RAM) lo permitieran− en tu monitor todas las imágenes, palabras, números... todos los sonidos en tus altavoces... se activarían la impresora, el escáner... 

El teclado, el ratón, el botón de apagado y encendido dejarían de obedecerte, volviéndose todo el sistema contra tus intentos de control. Eso es lo que le ocurre en ocasiones al cerebro humano; la cantidad de ideas, palabras, imágenes, cálculos, sentimientos, emociones, pasiones, afectos y fundamentalmente miedos, bullen sobre la consciencia, la torre de control, el lugar desde donde el ser humano maneja su disco duro, el inconmensurable almacén de inconmensurables datos almacenados a lo largo de la vida, impidiendo que se haga con el control de todo el sistema. 

Si alguna vez te has preguntado por qué los niños tienen esa increíble capacidad de abstraerse en un juego y olvidarse de todo, ahí tienes la respuesta: tienen menos información almacenada, menos miedos, responsabilidades y necesidades, y consecuentemente, menos basura mental perturbando la concentración de toda su capacidad mental en sus actividades. 

Esa misma ingente acumulación de información es la que cada noche construye automáticamente tus sueños en base a las vivencias de diferente intensidad y duración que han ido llegando a tu cerebro desde el momento de tu concepción, tus necesidades, tus alegrías, tus miedos y tus anhelos. 



Cómo lo ve uno mismo 

Imagina ahora, como si vieses por medio de una cámara que acelerase el paso del tiempo, que la consciencia eres tú mismo, y que la actividad de tu cerebro es la atmósfera. 

Desde tu punto de observación terrenal, el cielo no será otra cosa que una rápida sucesión o superposición de todas los infinitas tonalidades celestes, todos los tipos y colores de nubes, los relámpagos, rayos, lluvias, sonidos de vientos, objetos arrastrados por el viento, granizos, nieves, poluciones, aves, aeronaves, fuegos artificiales, la luna, el sol, los eclipses, cometas... mostrándosete en una rápida sucesión e incluso superposición. 

La cantidad de estímulos que se presentarían a tu vista te abrumarían, impidiéndote profundizar en la observación de ninguno de ellos, poco más o menos lo que ocurre con Internet (te llena más la cabeza de basura, y a eso lo llaman "Sociedad del conocimiento"). Sufrirías una visión sesgada de la realidad, superficial, atolondrada, a merced de los elementos, y desearías que todo aquello se detuviese un momento para tomarte un respiro.




Y ¿qué es lo que ocurre realmente en el cerebro? 

Ten en cuenta que ocurre −espacialmente− un poco al revés de lo que acabo de pedirte que imagines, en el cerebro la consciencia está en el neocórtex, la parte más exterior y evolucionada del encéfalo, mientras que el almacén de la actividad de tu cerebro en las partes más internas, el sistema límbico o mamífero, y aún más en lo profundo, el cerebro reptiliano. No es una descripción exacta, pero sirve para entendernos. 

De este modo, lo que conseguimos es que la consciencia-neocórtex se disocie de la información almacenada en los niveles más profundos del cerebro, algo así como lo que proponen algunas religiones orientales: el no-hacer del budismo zen, o hacer-sin-intención, sin implicarse en los fenómenos ni en los objetos de los sentidos. 

También como propone el hinduísmo: "Yo no soy mis emociones, yo no soy mi intelecto, yo soy sat-chid-ananda: conocimiento absoluto, experiencia absoluta, dicha absoluta, eso soy yo." (Vale, alguna cosa juiciosa también tienen)



¿Y cómo se hace para eliminar toda esa basura mental? 


Simplemente observándolo sin prestarle atención, sin dejarse arrastrar por sus 
elementos (truco de meditación budista zen y mindfulness, de lo poco aprovechable que tienen). 

Es decir, no te quedes absorbido por la lluvia porque, al ser tan cambiante, hace que en cada instante tu visión varíe, saturando tu memoria RAM; capturará tu mente, en suma. 

O sea: Disóciate de ellos, no te quedes atrapado por tus cambiantes pensamientos porque te esclavizarán. Simplemente obsérvalos como si fuesen meteoros y tú estuvieses sobre la tierra firme, sólida, consistente. 

Déjalos pasar uno tras otro sin prestarles atención y conseguirás dominar tu consciencia hasta unos límites que ya habías olvidado. 

Deja que tu consciencia de ser, libre, limpia, clara, observe los fenómenos atmosféricos que bullen en tu mente como si te diesen igual. Observa especialmente tus miedos, sé consciente de que aparecen en tu campo de atención, en tu mente, allá en las alturas, mientras tú estás, eres, ahí, en el centro, imperturbable, sereno y en paz. 

Si lo practicas, lo más normal es que alguna vez te descubras habiendo sido arrastrado por tu actividad mental y ello te cause desasosiego. Tranquilo, es absolutamente normal y hasta positivo, porque te permite contrastar la paz interior que proporciona la observación desapegada con los sentimientos a los que te arrastran determinadas ideas, normalmente sentimientos negativos, y más aún en esta época invernal que, además, viene acompañada de una crisis sin salida a la vista. 

Si practicas todos los días un ratito la observación de los contenidos de tu mente, unos cinco minutos −cuidado, que engancha− en cualquier momento (excepto cuando conduces y esas cosas, claro) te sentirás más consciente, más tranquilo, reducirás tu estrés, tus miedos, te enfrentarás a la vida con más seguridad y confianza, verás las cosas que ocurren sin implicarte en ellas y, lo más importante para nuestros propósitos, tendrás tu mente atrapada, dominada, sometida y subyugada por tu consciencia regia, a salvo de los torbellinos negativos que en estas fechas suelen echar leña al fuego de nuestras diferencias cotidianas.

Eso sí, no olvides que un idiota relajado sigue siendo un idiota, de modo que para asegurarte de no serlo, déjate guiar por Jesucristo, de esta forma serás un listo relajado. Y te ganarás la Tierra y el Cielo.


El segundo hombre en el mundo que logró hacer cien orgasmos por hora a su mujer cuenta su experiencia

Al parecer he ganado un concurso en el que el premio consiste en que escriba algo para este blog y, cómo no, lo haré desde la perspectiva de quien ha sido el primer lector que ha conseguido hacer a su novia 100 orgasmos en una hora (o más…). 

Y lo haré, si se me permite la osadía, hablándole directamente al lector, es decir, en segunda persona del singular. Sí, a ti que lees esto. 

En primer lugar, agradezco a Jack Hammer aquel primer post que me dedicó por haberle puesto los cuernos a mi pareja, el “Entrenamiento para la fidelidad y la libertad”. 

Parece una estupidez, lo sé, pero hoy día estamos rodeados de peligros en ese aspecto, tanto hombres como mujeres. Quizá aún más los hombres, cierto, pero el término “igualdad” del que tanto se habla últimamente también se aplica en estos aspectos, así que eso sigue valiendo para todos. Pero hay una diferencia fundamental de la que quiero que te des cuenta, amigo. 

Los hombres solemos poner los cuernos porque nos calientan, aunque sea sin querer, es decir, para nosotros sería algo primario, un instinto primitivo que responde a un estímulo, mientras que las mujeres nos ponen los cuernos por dos razones: porque no nos quieren, y porque se aburren con nosotros en la cama. 

Ten en cuenta que si nos quisiesen nos dirían que se aburren o querrían cambiar cosas. Así que en eso son iguales que nosotros, van a lo primario. 

Sabiendo eso… piensa un poco… si perfeccionas tu técnica sexual, tu mujer ya no podrá ponerte los cuernos, es decir, le quitarás una razón muy socorrida para dejarte, porque la Cienorgasmología es la técnica perfecta, yo lo llamo “el arte de amar a tu mujer en la cama”. 

En segundo lugar, la Cienorgasmología es sexo con amor, y para practicarla bien hay que empezar de cero, hay que olvidarse de uno mismo y anteponer el placer de tu mujer al tuyo propio. 


El concepto es éste: le haces los orgasmos que quieras en el tiempo que quieras, y como quieras. 


Suena algo competitivo ¿verdad? Vale, lo es, tómatelo así si quieres, no te vendrá mal si eres ambicioso y perfeccionista en tu trabajo… así lo serás también en el sexo… 

Reconozco que cuando empecé tenía ya una base, practiqué yoga intensamente durante muchos años, ahora más relajadamente; más tarde tuve una novia con la que practicaba sexo tántrico, así que pude asimilar cosas de ambos en muchos sentidos. El yoga me aporta un gran control de mi mente, y el sexo tántrico de mi cuerpo, por así decirlo, pero el sexo tántrico es muy complicado porque es un concepto muy espiritual del sexo y confieso que acaba cansando. 


Pero realmente no son necesarios ni uno ni otro, ni siquiera para conseguir adoptar la postura Cienórgasana, que es mucho más sencilla de lo que parece. 

Cuando empecé con esto fui muy rápido, algunos amigos estaban impresionados, Jack incluido. Pero muchos ingenuamente pensaban que estaba una hora entera con el coito… Así somos los hombres supongo pero tampoco es eso ¿eh? 

Además de pélvicos hay muchos toques manuales… y son muy importantes sobre todo porque, si no, ella tiene problemas de lubricación importantes y le duele, y a mí puede empezar a dolerme también. Así que la cosa es ir controlando tu mente parando cuando tengas que parar, utilizando alguna técnica para controlar la eyaculación, como las que Jack explica aquí.

Cuando aprendes a controlar tu mente es cuando más orgasmos le haces a tu mujer, créeme, incluso sin necesidad de controlar la suya en exceso. 

Piensa que ellas son multiorgásmicas y fisiológicamente están preparadas para ello porque no necesitan descansar entre orgasmo y orgasmo, mientras que nosotros sí, de ahí que tengas que aprender a controlarte. 


En este punto seguro que pensarás… ¿controlar la mente?¿Y eso qué coño tiene que ver? 

Pues sí, lo tiene TODO que ver. Cuando dejes de ver el sexo como algo físico más que mental lo entenderás, el orgasmo viene de la mente, no del cuerpo, es la respuesta a un estímulo. Ese es el concepto que tienes que cambiar. 

Y para terminar, me viene a la cabeza una pregunta que me han hecho al respecto sobre ella, la mujer, sobre cómo aguanta. Yo siempre contesto que ella aguanta lo que yo aguante. 

¿Escocida? Al principio sí, para que te voy a engañar, pero luego su cuerpo se va acostumbrando y lo va tolerando cada vez mejor. Eso sí, hay que ir poco a poco ¿eh? No pretendas hacerle 20 ó 30 ya de paso, así, de primeras. No hace falta que te hagas el chulito; ve poco a poco, obsérvala, mímala, toques verbales cariñosos, suaves, dale confianza… y a la vez, introduce nuevos toques pélvicos. Contrólate.


¿Importa el tamaño? (Del pene o la pena)

Ya hemos comentado en otras ocasiones que el cerebro tiene un funcionamiento curioso, y que si los medios de comunicación nos dicen que somos los que menos chingamos de Europa nuestra autoestima nacional −si es que queda algo del orgullo de Raza− se resiente. Ni por asomo se nos ocurre pensar que quizá es que tengamos mejores cosas que hacer, por ejemplo salir a tomar una caña (de cerveza, traduzco para los lectores de Hispanoamérica) −unas cañas antes de la crisis− con los amigos; ni que con qué argumento se defiende que sea mejor echar cinco kikis a la semana que dos.



Y si nos dicen a los machos hispanos que un famoso ponrstar tiene un mango de 25 cm. sufrimos un ataque de envidia y depresión. ¿Estamos tontos o qué? ¿Es que más es mejor? Dudo mucho que ningún pornstar del planeta nos llegue a los cienorgasmólogos a los talones. De hecho los que habemos repartidos por el mundo −al menos cinco que sepamos por las estadísticas del Blog más este servidor− sabemos que no, que importa más la calidad que la cantidad, pero aún así el asunto sigue dándonos dolores de cabeza, sobre todo porque las féminas últimamente parecen tan insatisfechas con las prestaciones de sus compañeros de cama que sienten la necesidad de probar a ver qué tal con ese fálico vegetal del hipermercado. 


Total, igual que las toallitas higiénicas para bebés las usamos los mayores para limpiarnos salvas sean las partes después del sano fornicio, podemos comprar tranquilamente un kilo de calabacines porque nadie va a pensar que antes de preparar la sabrosa crema vamos a aprovechar uno para hacer experimentos, sin tener que pasar la vergüenza de entrar en un sexshop ¿verdad? ¿O soy un malpensado?



Las marditas estadísticas

Según las estadísticas, los españoles e hispanoamericanos caucásicos nos movemos de media en una franja que va de los 12 a los 16 centímetros de largo y alrededor de 3.8 cm. de diámetro. Los africanos nos ganan por unos cuatro cm. de largo y 1.2 de diámetro. Dejando aparte aspectos como el mayor grosor de la piel de africanos y mestizos que pueden requerir mayores dimensiones para que ellas se enteren de algo, parece obvio que la naturaleza, una vez más, muestra su sabiduría.

Porque... ¿quién y para qué quiere tener un cacharro descomunal? Hace unos días hemos podido ver a Antonio Lobato, el presentador de la F1 en la TV de España, probar un R24 en el circuito de Magny Cours, uno de los coches con los que Fernando Alonso consiguió sus dos campeonatos del mundo, y el pobre ni se acercó a los tiempos que Magic emplearía haciendo el recorrido marcha atrás. También vemos que algunos de los jinetes de los pepinos más impresionantes de la temporada actual dejan mucho que desear a la hora de sacarle todo el jugo a su aparato. Evidentemente es necesario tener un material mínimamente competitivo, pero igualmente hay que reconocer que lo importante es la calidad del piloto.


Más absurda es la pretensión si tenemos en cuenta que la vagina tiene unas medidas de 8 cm. de longitud por la parte anterior −la más cercana a la vejiga y al abdomen− y de 12 por la posterior, lo cual quiere decir que pasando de 12 cm. lo más probable es que lleguemos a hacer tope en alguna ocasión, como cuando sentimos que la punta está tocando algo por ahí dentro −el cuello del útero− en posturas en las que aproximamos sus muslos a su abdomen. Un servidor −como español de raza de apellido visigodo− es de esos que no superamos los 17,0 X 5,0 y ya sabéis de sobra que no es precisamente que yo tenga problemas para satisfacer a las féminas.


El truco

Como nos recuerdan nuestros hermanos mexicanos en este vídeo, el responsable del orgasmo es el cerebro, así que olvidémonos de comeduras de coco y paremos la mente cuando un pensamiento deprimente de este tipo nos asalte. Y si alguna vez queréis regalar a vuestra mujercita una sensación de plenitud sin artificios vegetales o sintéticos, ahí va el truco: mete junto al churro uno, dos o más dedos con cuidado. Así de sencillo y de barato. Y, Bibi, vale tanto para el culo como para la cula. ¡Y no necesita pilas!




Ponte el culo por cabeza - La aberración progre de la semana

Desde su nacimiento, el siniestro socialismo ha intentado denodadamente descerebrar (más) a la chusma a fin de que entienda por las buenas o por las malas que su pseudo religión constituye la salvación eterna para su alma, y que las aberraciones que perpetra son por su bien individual y el bien del dios pueblo. Los nobles Gramsci y Lukacs ya probaron el método el siglo pasado instaurando un modelo de Educación para la Ciudadanía Zapateril y vaya si funcionó, los que tenemos la desgracia de formar parte de la Generación Baby Boom hemos sufrido una desorientación que ha llevado al mundo a convertirse en una especie de manicomio lleno de tontos útiles, para solaz del amigo Lenin y su imprescindible cohorte de sinmentes para los que todo está permitido, dando como resultado cosas como estas:

Esta guía va de culo
Estamos tan sistemáticamente desensibilizados por aberraciones como las muertes útiles para ganar elecciones de los socialistas, que estas cosas ya ni nos hacen mella. Pero no me negarán que es aberrante para quien no haya sido abducido por la secta. Pues aunque parezca increíble, “Esta guía va de culo” es el título de un folleto subvencionado con 359.000€, (560.000$ ó 59.732.574 pesetas) por el Ministerio de Sanidad del Gobierno de Expaña para promocionar el sano uso de la mierda en la ciudadanía, como en esta web cultural de Catetonia −en catetolán y expañol−, donde no sólo no recomienda la abstinencia en el consumo de drogas, sino que las promociona.
Por ejemplo, sobre los poppers -droga que se inhala- advierte sobre ciertos efectos nocivos aunque destaca implícitamente sus beneficios cual si se tratara de publicidad de un Sex Shop: «Te relaja y ayuda a que tú y el otro tío os pongáis cachondos». La guía Domina los culos enseña, en un capítulo titulado Meterse drogas por el culo, que "hay tíos que se meten drogas por su efecto anestésico. Esto se puede hacer con drogas en polvo o con pastillas disueltas en agua (speed, éxtasis, cocaína o heroína). De este modo, las drogas se absorben más rápidamente y pueden tener un efecto más potente".



O sea, que no pasa nada si te drogas aunque sea algo nocivo, porque lo realmente importante y valorable para todo ser humano evolucionado que se precie, es disfrutar a tope.

Si quieres que te la metan
En el capítulo «Si quieres que te la metan», la guía admite la posibilidad del consumo de drogas como si te estuvieses tomando unas cañas con los amigos: «Si te has metido drogas puede que alteren tu estado de conciencia... Es decir, que no te des cuenta del daño que te puede estar haciendo (desgarros o fisuras del tejido interno del colon)».
Una vez más, como en toda la guía, prevalece el placer sobre cualquier otro valor humano e incluso sobre la salud, aunque te destrocen el esfínter anal con un caballo o un calabacín de cuatro kilos.
La guía informa de un modo explícito, sobre prácticas sexuales tales como el «Scat», del que asegura que «embadurnar de mierda a alguien o jugar con ella no tiene riesgo de infección o reinfección para el VIH. Aun así, los juegos escatológicos pueden tener riesgo de infección para otras infecciones de transmisión sexual, como la hepatitis A.
No es que jugar con mierda sea algo malo en sí mismo, no te vayas a creer, sólo es que hay que tener cuidado no vayas a pillar la hepatitis, porque el SIDA no, tranqui, comemierda.

La web cultural para la juventud catetolana


Qué dirá de todo esto el ministro de Sanidad, el ilustre falsificador de su currículum Bernat Soria? Por cierto, la ministra de Defensa, la catetolana de la raja y el bombo ¿va a limitar también a los militares el acceso a esta web catetolana? Seguro que no, propondrá que lo incluyan en su formación militar para que aprendan a hacer el amor y no la guerra, que es lo que mola.

¡País de locos!



Los perjuicios de los juguetes sexuales para la mujer (consoladores (dildos), chupadores (satisfyer))













Para no herir la sensibilidad académico-profesional de nuestra amiga Lía,
advierto que, por supuesto, como afirma el Tao Te King:
"El Tao que puede ser expresado no es el Tao absoluto";
por lo que necesariamente generalizo y no me voy a esforzar excesivamente
en adaptarme a la jerga sexológica estilo Lorena Berdún,
para mi gusto absolutamente repugnante,
capaz de explicar cualquier zafiedad o aberración
con empalagosos eufemismos más propios de una monja decimonónica
que de una "liberada" sexual.
El mundo al revés.


En fin, al grano. El perjuicio de los cachivaches a las mujeres "limitadas" (o sea, con algún tipo de limitación para tener orgasmos, que todo hay que explicarlo) es la fijación de un condicionamiento. Si no tengo orgasmos con un hombre y sin embargo los tengo con un chisme ¿qué debo hacer? En primer lugar recomendar este modesto Blog a mi marido. En segundo entender por qué no tengo orgasmos.


Las limitaciones para experimentar orgasmos están en la cabeza, no en el cuerpo. ¡Fuera el falso mito de las mujeres "clitorídeas"!. Todas las mujeres, incluso las salvajemente mutiladas por los bárbaros incivilizados, pueden tener orgasmos con la penetración vaginal, anal, o incluso sin acercarse a sus áreas genitales.

  1. Es probable que la causa de muchos casos de limitación para experimentar orgasmos sólo con la penetración tenga que ver con la masturbación demasiado habitual y precoz de la mujer durante largo tiempo, en la adolescencia, que ha creado un fuerte condicionamiento: “me estimulo el clítoris, luego tengo un orgasmo”, antes de experimentar la penetración: "me la mete y ¡joder qué daño me hace el animal este!". La mujer que abusa precozmente de la masturbación está entrenando su sistema nervioso para que reaccione así. En otros casos puede ocurrir que su compañero sea un zarpas total, claro está, pero de eso no hablaré ahora.

Si es este el caso, la receta es clara: cortar el condicionamiento, hacer que se extinga la respuesta al estímulo a base de dieta “hipoclitorídea” estricta. Ni tocarlo. Si uno no es un maestro en el arte de atrapar la mente de su mujer tendrá que estimular suave y progresivamente durante un tiempo la región vaginal a fin de que las terminaciones nerviosas que la inervan logren sentir progresivamente mayor placer. ¿Qué es un coñazo?. ¿Sí?. ¿Pero tú sabes remotamente lo que es el amor, machote? ¿No te estarás masturbando con tu mujer como si fuese un objeto y pasando olímpicamente de preocuparte de ella, no? ¡Anda queee!

  1. La segunda y última causa de limitación con la que me voy a meter es la inversión de papeles, concretamente la asunción de una posición dominante por parte de la mujer. Creo que ya he dicho que la experiencia del orgasmo en la mujer es directamente proporcional a su entrega al hombre. Luego si la mujer no se entrega no tendrá orgasmos vaginales o los tendrá con dificultad. La causa de esta limitación acostumbra a ser un conflicto con el sexo opuesto, normalmente con el padre, al que reprocha inconscientemente algo. De modo que con su anorgasmia le está diciendo a su marido: “jódete, que no me vales ni para esto, impotente”. Las jodías, sin embargo, sí pueden tener orgasmos con la penetración en situaciones muy morbosas. Desesperante, ¿verdad?.

Si es este el caso, la receta es clara, pero no tan fácil de cocinar como la anterior, machote, porque tendrás que aprender a hipnotizar a tu mujer, a atrapar su mente para bloquear sus programas erróneos. Y tú cambiar también tu software sexual. Próximamente explicaré de qué va eso de atrapar mentes y cómo se hace, que si te lo digo todo ya, no vuelves a visitarme.

Resumiendo. Si una mujer depende excesivamente de los cachivaches, su dependencia crecerá con el entrenamiento, como todo, y terminará por usarte a ti de “complemento”; se masturbará con tu cuerpo, pero no serás tú quien le haga sentir placer sino que se lo hará ella a sí misma con tu minga, pero le daría igual que fuera con una de pichiglás, no te vayas a creer. Te convertirás en un objeto sexual más, acabarás tú también por no experimentar placer y te frustrarás, tu matrimonio se deteriorará y tendrás más tentaciones de buscarte a otra que se derrita con tu cola dentro y te haga sentirte macho dominante.

A ella le pasará más o menos lo mismo, necesitará cachivaches cada vez más sofisticados, hasta que tú ya no le hagas ni cosquillas o la aburras mortalmente, por lo que acabará por desear que un machote boy le eche un caliqueño salvaje que descoyunte la pelvis y le haga sentirse mujer. ¿Te das cuenta ya de que su limitación está en su coco y no en su cuerpo?

Lo alucinante de atrapar la mente de tu mujer es que ni se enterará de lo que estás haciendo, sólo sentirá que hay algo diferente pero no podrá identificar qué es (a no ser que se empolle este Blog) y, sin daros cuenta, se estará corriendo como una salvaje. Y los dos encantados. Y yo por vosotros.

Ánimo, ya estás más cerca de hacerle cien orgasmos por hora a tu mujer. Si lo he conseguido yo sin ayuda, que no soy más que un pobre gilipollas, seguro que tú lo consigues más fácilmente.